@deportesavila / Un 22 de abril del año 1975 nacía el ganador del Tour de Francia 2008, Carlos Sastre, el único abulense que ha sido capaz de subirse a lo más alto del podio final de los Campos Elíseos en París. Confinado en su casa de El Barraco, en el día de su cumpleaños es un buen momento para recordar la entrevista que nos concedió el pasado mes de diciembre.
¿Qué queda del Carlos Sastre que fue ciclista?
Pues queda todo. Su experiencia, su forma de entender la vida. Creo que queda todo desde un punto de vista diferente. Antes mi trabajo era montar en bicicleta y ahora hago cosas diferentes, pero en ese sentido sigo siendo lo mismo.
¿Cómo es la vida después de dejar el ciclismo profesional? ¿Cambia mucho?
A ver, cambia todo. Antes mis horarios eran diferentes. Los que tengo ahora son otra historia. Antes, yo sabía que me levantaba, desayunaba, me iba a entrenar, descansaba e iba a diferentes competiciones. Ahora es una cosa diferente porque cuando empiezas en el mundo de los negocios todo es algo nuevo, pero quedan la ilusión y la motivación por seguir haciendo cosas.
Es frecuente que te inviten a eventos como el que ocurrió en Australia. ¿Qué supone que se acuerden de ti después del cese de la actividad deportiva?
A este tipo de eventos sigo yendo desde el primer día en que dejé de montar en bicicleta a nivel profesional. Desde entonces, he seguido haciendo eventos y actividades de este tipo. En mi caso, me hace ilusión sobre todo conocer sitios nuevos que en mi época como ciclista profesional, o bien no he tenido el tiempo suficiente para conocerlo o no he tenido la oportunidad de ir por diferentes circunstancias. Entonces, que me inviten ahora a Australia, a México, a Colombia, a Brasil y a otros países, me hace ilusión.
¿Qué diferencias hay entre el ciclismo en el que competías y el actual?
Todo evoluciona, unas cosas afortunadamente mejoran, otras parece que se quedan estancadas y parece que el pasado tiene más importancia y relevancia que el presente. Pero yo creo que la diferencia más grande que hay es que antes conocíamos la historia de este deporte y conocíamos a nuestros antecesores y hoy en día es como que te quedas en el presente y no conoces el pasado de este deporte.
Sigues vinculando al ciclismo deportivo a través del Club “Soy Ciclismo Club”. ¿Qué objetivos tenéis de cara a la próxima temporada?
Nosotros tenemos escuelas, cadetes y junior, y nuestro objetivo es muy sencillito. Lo que queremos es que los chavales hagan deporte, en este caso a través de la bicicleta. Lo que buscamos aquí es que los tengan la posibilidad de formarse de manera completa. Es decir, que los chavales vean en el deporte una manera de poderse formar integralmente y que, por supuesto, no olviden que los estudios son el pilar que los va a acompañar el resto de su vida.
¿Es difícil seguir con el legado que ha dejado tu padre en materia de fomento del ciclismo en la provincia?
Es complicado porque evidentemente conseguir lo que él ha conseguido, que 15 o 16 chavales hayamos tenido la posibilidad de ser ciclistas profesionales y de lograr resultados es muy difícil. Luego también la cultura que tenemos los padres hoy en día ha cambiado respecto de la que tenían antiguamente. Todas esas cosas hacen que ese legado sea muy importante, muy valioso y que hoy en día conseguir eso sea más complicado.
Tienes dos hijos ciclistas. ¿Te gusta que practiquen el ciclismo o preferirías que se dedicasen a los estudios?
Mis hijos practican todo tipo de deporte porque eso es lo que les va a dar una capacidad de poder conocerse ellos mismos y sobre todo saber qué es lo que les gusta realmente. Porque cuando hacen una cosa o les encaminas en una dirección, al final no tienen la oportunidad de conocer muchas otras co- sas. Hoy en día tenemos una riqueza deportiva tan sumamente grande que incitarles a que hagan una sola cosa no me parece positivo. En el caso de mis hijos, la niña tiene más clara la parte académica con la universidad, y en el caso del niño le sigue gustando el deporte; son 15 años y es diferente.
¿A los que empiezan ahora en ciclismo qué les recomendarías?
Yo hoy en día lo que quiero es que los chavales hagan deporte y se diviertan haciendo deporte. Son los ingredientes que a mí me ayudaron a forjarme como ciclista y a tener un futuro en el ciclismo, y sigo creyendo en ellos como pilares.
¿Alguna vez pensaste cuando empezabas que ibas a ganar el Tour de Francia? ¿O lo veías como algo muy lejano?
No. Evidentemente cuando corres el primer Tour de Francia te parece imposible que lo puedas conseguir. Son experiencias nuevas que las vives de una manera súper intensa y que, evidentemente, cuando no estás acostumbrado a ese tipo de situaciones, te llevan a un estado a nivel psicológico, pero cada día que pasaba, aquello me animaba más y soñaba con ganar aquella carrera porque para mí era lo más importante que había.
De toda tu carrera, ¿el recuerdo más importante es ganar el Tour?
La verdad es que el Tour lo que hace es que el resto de la gente te recuerde. Es un resultado muy importante, pero en mi carrera deportiva tengo muchísimos momentos, experiencias…, situaciones que te ayudan a enriquecerte como persona, como deportista y que te acompañan el resto de tu vida.
Estuviste en los Juegos Olímpicos de Pekín en 2008. ¿Quizás sea ese un recuerdo especial den- tro de tu carrera por las connotaciones que conllevan participar en unos JJOO?
Aquel momento fue muy bonito porque estás con los mejores deportistas de tu disciplina y con los mejores deportistas de todas las otras disciplinas deportivas que hay a todos los niveles. Compartir experiencias y todo ese tipo de situaciones con esos deportistas, hace que probablemente sea el más bonito a nivel deportivo. Pero tengo muchos otros recuerdos. He tenido la suerte de ayudar a corredores a ganar y también ganar yo. Todo eso te enriquece y te sientes feliz. Me quedo con ese momento especial por encima de otro que evidentemente es el Tour. Hace que sea especial por sí mismo.
¿Te costaba mucho entrenar en tu época de ciclista?
A mí me gustaba y disfrutaba muchísimo de aquello. Cada día de entrenamiento era un día de hacer lo que me gustaba. Es un trabajo, pero es un trabajo en el que disfrutas.
Y de los ciclistas españoles actuales, ¿a quién ves en el futuro como posible figura?
Yo creo que en el momento en el que Valverde se “jubile” va a haber un vacío importante. Hay corredores que lo están haciendo bien, como puede ser el caso de Landa, de Peio Bilbao, Omar Fraile o el mismo Luis León Sánchez. Es una generación muy cercana a la nuestra. Son corredores que tienen capacidad de hacer cosas, pero evidentemente la generación que hemos tenido se le va a echar en falta muy pronto. No sé si se están haciendo las cosas como se deberían hacer para fomentar de nuevo que la cantera tenga un futuro. En ese sentido, creo que hay chavales que están montando en bicicleta, pero tienen un proyecto a corto plazo. Muy cortoplacista, muy de dar la razón a los padres y muy de hacer lo que los padres quieren. Eso no contribuye a que haya un futuro importante.
¿Dentro de los de Ávila hay alguno que crees que pueda destacar?
A día de hoy, tenemos a David González, Diego Rubio, a Nacho Pérez y algún corredor más. Son corredores que lo pueden hacer bien, que se meten en sus fugas, con rapidez. Son chicos que tienen ganas, pero no los he visto todavía marcar la diferencia de una manera clara. Y con todo mi respeto lo digo. Llegar a profesional es muy complicado y mantenerse lo es todavía mucho más. En ese sentido, me gustaría que alguno de ellos pudiera ser algo más.
¿Sigues con intensidad y frecuencia el mundo del ciclismo?
Me gusta pero no veo todas las carreras porque mi día a día me lo impide, pero sí sigo los resultados y las cosas con un poquito de atención. No toda como la que tenía antes, porque en el momento en que lo dejas se te escapan muchas cosas, pero sí que tengo la capacidad y la objetividad de poder hablar de ciclismo con actualidad porque tengo relación con mucha gente, que es muy cercana a mí, que siguen dirigiendo equipos o que están involucrados en algún equipo de una manera u otra.
Esta es la última. Has comentado puntualmente en la televisión pruebas ciclistas. ¿Es algo que te interesaría hacer nuevamente o es algo casual?
En su momento, hice dos años con TVE el Giro de Italia. Lo hicimos con Teledeporte hasta que Eurosport compró los derechos. Fueron dos experiencias que me gustaron y me siento feliz de haber participado. Ahora lo hago de manera ocasional. Mi futuro y mi presente están ligados más a otros temas que probablemente a la televisión.
Para eso está Pedro Delgado…
Eso es. De momento está Perico por ahí que lo hace bien, se lo pasa bien. Cuenta unos chistes de los malos y la gente tan contenta (risas).