Ángel G. Alameda / Perder en el último partido del año no entra en los planes del Real Ávila. Aunque en fútbol todo es posible, la situación del rival Ponferradina B es diametralmente opuesta a la de los encarnados. El calendario en su cierre de 2023 ha querido que el destacado líder visite al farolillo rojo.
Para el entrenador visitante, Miguel de la Fuente, la pausa de la semana pasada con la disputa de la Copa Regiones UEFA les ha venido bien. “Llevábamos mucha carga física, hemos desconectado y el equipo ha vuelto más fresco”, con los cinco jugadores que han intervenido con Castilla y León ya sin la obligación de acudir a esta competición al haber sido eliminado el combinado autonómico. Además, unido al parón navideño servirá para recuperar a futbolistas que se encontraban lesionados para “en el segundo tramo de la temporada tener a todos los efectivos disponibles” porque ahora mismo “no llegamos como a mí me gustaría en cuanto a soluciones durante el partido”.
“Veo al equipo enganchado y con buenas sensaciones” y terminar así el 2023 es “vital”. Que los rivales les “vean arriba, distanciados, es muy importante”. “Queremos ser los mejores de la categoría”, comenta el técnico vallisoletano, quien no quiere relajación porque se enfrenten al colista. “Va a ser un partido duro e intenso. El punto tanto para ellos como para nosotros puede ser válido y les va hacer estar muy altos en el partido. Si el resultado les es favorable, les va a hacer crecer”, indica.
En todo caso, “dependemos de como estemos nosotros que de los rivales”, asegura el míster. “Sumar fuera de casa tiene que suponer un esfuerzo y saber donde estamos”, señala De la Fuente, cuyo equipo va “a todos los campos a ganar, con la humildad de que lo primero es conseguir el empate y luego sacar los tres puntos”.
ANTE EL MÁS DÉBIL
Los abulenses se presentarán en Compostilla desde la atalaya más alta de la tabla mirando desde arriba al más débil de todo el Grupo VIII que aparece como víctima propiciatoria por estar con solo seis puntos y su casillero de victorias vacío. Una diferencia abismal entre uno y otro, con los bercianos habiendo encajado 7 derrotas y 6 empates, uno de ellos arrancado en Sancti Spíritu al DiocesÁvila. En casa ha cedido nada menos que 16 puntos.
Para De la Fuente la Ponferradina B es “un equipo muy intenso, que ha sido capaz de ir ganando 1-3 en Becerril, aunque luego empataron, al igual que con el Astorga y contra el Bembibre. Seguro que va a competir. Sabe que este tipo de partido a nosotros se nos puede atascar”. Respecto a las características del conjunto berciano “tienen velocidad por fuera, sobre todo por la banda izquierda, altura y mucha velocidad en transición, con jugadores sub-23 totalmente y las peculiaridades de ser un equipo filial”.
Considera el entrenador encarnado que para vencer deberán “ser muy agresivos en la presión y tener claro que no podemos meter un último aliento al partido como nos pasó con el Diocesanos. Una cosa es tener paciencia y otra no robar y mirar para adelante sino mucho juego horizontal. Tenemos que cargar al área contraria, provocar que sus defensas tengan que estar constantemente en vigilancia y ser capaces de correr al espacio. Así les haremos daño”.
Es evidente que cualquier otro resultado que no sea el triunfo sería un varapalo para los abulenses, conscientes de que son superiores -por algo van primeros-, aunque el filial de la ‘Ponfe’, en horas bajas, puede despertar en cualquier momento porque está muy necesitado de puntos y la espada de Damocles del descenso cada vez está más cerca. Es por ello que saldrán para disparar con todas sus armas y amargar la tarde del sábado a un equipo que no debe despistarse.
Una victoria será clave para que el Real Ávila acabe el año liderando con una ventaja de al menos seis puntos, para continuar en 2023 con la tranquilidad que da una renta importante, dependiendo de sí mismos para lograr el título de campeón.
PONFERRADINA B - REAL ÁVILA
Sábado 16 de diciembre de 2023
Hora: 16,00
Campo: Compostilla-Vicente del Bosque (Ponferrada)
Árbitro: David García Presa (León), asistido en las bandas por Eduardo Carrera Rabanillo y Miguel Regalado Matías
