@deportesavila / Nos tienen acostumbrados los Grizzlies muy mal. Normalmente los naranjas no hacen más que darnos alegrías y asombrar a propios y extraños cada vez que saltan al verde.

Pero en esta ocasión, las dos palabras que encabezan esta noticia, definen perfectamente lo sucedido en el Fermín Cacho de Fuenlabrada, el pasado sábado en el partido que enfrentó a Fuenlabrada Wolverines-Grizzlies con Pinto Goldbats en la liga madrileña de fútbol americano en el que los nuestros solamente pudieron dedicarse a encajar tanto los golpes como los puntos.

Todo hacía presagiar que no sería una jornada tranquila desde antes de salir de Ávila. Los naranjas adelantaron la hora de salida de nuestra ciudad, en previsión de tener problemas en el desplazamiento debido a la huelga de agricultores y llegaban a Fuenlabrada a las 13:30 horas donde aprovecharon para comer en la puerta del complejo deportivo, mientras la lluvia y el granizo caían con fuerza. 

PROBLEMAS CON LA PRIMERA RETRANSMISIÓN

Empezaban los problemas en la preparación de la transmisión del partido ya que las precipitaciones caídas una hora antes del encuentro imposibilitaban el despliegue de cableados y la instalación de la cámara. A esto se unían también los fallos en la cobertura de internet que hicieron imposible retransmitir tal y como se tenía previsto aunque finalmente se pudo llevar a cabo únicamente por YouTube y prácticamente sin medios.

Si bien, de antemano los naranjas, en esta ocasión de blanco, sabían que era un partido muy difícil debido a la enorme diferencia de edad con los pinteños. Llegaban con muchas ilusiones para intentar plantarlos cara, pero pronto se torció todo.

En los primeros compases del encuentro, el WR con más experiencia de Grizzlies, Elías Oviedo Velasco sufría una rotura de fibras que le hacía abandonar el partido y se convertía en el primero de los seis lesionados, con los que acabarían el encuentro los abulenses. Poco después, el RB Daniel Gil Collado también tomaba el camino a los vestuarios al recaer de su lesión de rodilla lo que hacía que los naranjas perdieran mucho del potencial de ataque.

Seguía poco después la sangría con las lesiones de Héctor Velázquez (DL), Aarón Rodriguez (LB), Marcos Hernandez (C), David Moreno (LB), Álex Jorge (DB) y Joel Rilo (RB) y aunque no les obligaron a abandonar el partido, si hicieron mermar su participación en el mismo.

PINTO MUY SUPERIOR

En lo deportivo, nada que objetar a la victoria por méritos propios de Goldbats ya que el partido comenzó siendo favorable desde el primer ataque de los pinteños, momento en el que anotaban y se ponían por delante en el marcador por 0-7 y que sería la tónica durante toda la tarde.

Los naranjas se dedicaban únicamente a luchar como gato panza arriba para intentar que la sangría fuera lo menos dolorosa posible aunque no lo consiguieron en ningún momento. En cada ataque de los nuestros costaba una eternidad avanzar alguna yarda. Nuestra línea ofensiva no era capaz de darle al QB el tiempo necesario para elaborar las jugadas de ataque lo que hacía que la mayoría de las jugadas fueran para pérdida de yardas.

En defensa, cada ataque de los visitantes era un auténtico suplicio para el conjunto local que únicamente podía ver como Goldbats anotaba una y otra vez.

Así, se llegó al final del partido con un abultado resultado de 0-45 que bajó a los nuestros de la nube en la que estaban desde su partido de debut con Camioneros, en el que perdieron 9-8 en un resultado ajustadísimo.

Bien es cierto que los naranjas no tienen ninguna experiencia en contacto, que casi todos son júniors de primer año y que no es fácil disputar una liga con el nivel de la liga madrileña con estas premisas, pero el nivel mostrado el sábado no tiene nada que ver con el potencial de los nuestros.

Ahora, toca seguir trabajando las próximas semanas con mucha más intensidad y energía a la vez que se recupera a los lesionados lo antes posible, para volver a enfrentarse a Pinto Goldbats en la próxima jornada que será la tercera para los nuestros, con el objetivo de poder poner en el campo todo su potencial y volver a traer buenas noticias de fútbol americano a nuestra provincia.

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