@deportesavila / Al finalizar la rueda de prensa posterior al partido contra el Atlético Bembibre, Miguel de la Fuente declaraba que “entrenar al Ávila no es fácil porque tienes mucha gente detrás. Es una exigencia todos los días. Todo el mundo habla del ascenso y yo sé lo que falta por jugarse. Sé los rivales que faltan de venir por aquí. Sé lo que van a apretar. Juegas un partido en casa y vas ganando todos los partidos por 1-0, lo tenemos que valorar como tres puntos que pueden ser los que nos den el objetivo. Ahora mismo tenemos tal ilusión que si no llegamos a ascender sería una drama”.

El míster encarnado era consciente de que jugaban “contra ese equipo que junto con el Mirandés B juega muy bien al fútbol. Tiene un nivel de intensidad altísimo y jugadores de calidad. Varios de ellos podrían ser titulares en el Real Ávila”. Las cosas no salían y por eso en el transcurso del encuentro tuvo que “cambiar la estrategia para poderlo sacar adelante”.

Nos esperábamos a Álex Martínez por arriba, con Del Valle por detrás. Son jugadores que intercambian mucho la posición e incluso se convierten en media punta. Buscábamos que la posición que antes hacía Iván Revuelta que la hiciera Paco Benítez para que tanto Dani Tena como Alberto Martín pudieran saltar a la presión de ellos, además de tener algo más de pie con Alberto para intentar el último pase o el robo cuando tuvieran que jugar entre centrales y a partir de ahí transitar”, explica el entrenador vallisoletano sobre la táctica dispuesta.

Indicaba De la Fuente que en la segunda parte habían intentado “salir más a campo contrario para que tuvieran que desplazar más el balón, asumiendo riesgos”, aunque “cuando te coge Tato por la banda izquierda es un puñal y Dani Ceínos en las conducciones que hace hacía dentro otro. Sabíamos que ahí podíamos tener un problema. Pero también sabíamos que íbamos a llegar más y a forzar más el balón. Ellos podrían sufrir. Casi hacemos gol con Shergo en la parada que ha hecho Ivanildo. Estábamos generando balón parado en lo que somos fuertes. En las segundas acciones intentamos meterles en su área y es cuando conseguimos el balón en la frontal que nos ha dado el gol del tiro a puerta de Álex Moreno”.

Es muy difícil estar a un nivel altísimo toda la temporada

Los futbolistas del Bembibre no se pusieron nerviosos y “han estado muy cómodos”. “Alberto está ahora atravesando un momento en el que no le salen las cosas. Yo le quiero ayudar. Le estoy poniendo a jugar en distintas posiciones. Si a eso le sumas que Toper no tiene su mejor racha…”, reflexionaba De la Fuente.

Si nuestro mínimo el día que estamos mal es empatar a cero, estamos muy bien”, señalaba el técnico, que se preguntaba “¿cuántos partidos se han ganado por más de un gol esta jornada?”. “Hemos encontrado ganar en el último minuto, lo que genera grupo en buen ambiente”, apostillaba.

Estamos concediendo pocas situaciones de gol. Eso no quiere decir que juguemos mejor o peor sino que sabemos en lo que somos fuertes. Tenemos calidad arriba y con lo que hemos incorporado hemos encontrado el gol en el último momento, una acción de calidad con tiro a puerta desde la frontal. Mejor imposible”, señalaba Miguel de la Fuente.

Acerca de la presión de la afición desde la grada indicaba el entrenador del Real Ávila que “la gente aprieta, la gente empuja, pero lo que se trata es que cuando no puedes ganar es de no perder. La gente lo tiene que entender. También hay que saber tener un poco de coherencia. Hay jugadores que juegan peor aquí en casa que fuera. Y es un poco por esa exigencia tan altísima que tenemos”.

De la Fuente quería “celebrar como nunca y valorar ganarle a un equipo como el Bembibre, que tiene menos puntos de los que merece y que por juego es de los que dignifica la categoría”.

Álex Moreno: “Si tenía una fuera del área, iba a probar puerta

El autor del gol de la victoria del Real Ávila comentaba que “sabíamos que el partido era muy complicado. El Bembibre tiene jugadores de mucha calidad, muy rápidos arriba. Llevábamos toda la semana trabajando el esquema del rival”. Y en su trabajo estaba en mente que “si tenía una desde fuera del área, iba a probar puerta. En cuanto he controlado con la pierna izquierda sabía que iba a disparar”. Lo hizo con éxito y su tanto servía para dar tres puntos a su equipo.

Queda mucho” y pese a la amplia ventaja que posee el equipo “tenemos que trabajar cada semana para no despistarnos porque luego acabas perdiendo puntos que no debías perder”. Por eso ya están “centrados en nosotros mismos para el fin de semana sacar los tres puntos” en Palencia.

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