Cuando ganaba y dominaba el equipo abulense, la interrupción del partido rompió el ritmo encarnado
Piru jugando bajo la nieve |
El Norte de Castilla / El Club Deportivo La Granja y el Real Ávila firmaron tablas en un partido marcado por la nieve y en el que ambos se repartieron el dominio en diferentes tramos. Mandaron primero los abulenses, que hicieron diana al poco de comenzar, y reaccionaron los locales, que mejoraron su rendimiento tras la interrupción de treinta minutos que sufrió el choque en la primera parte.
La nieve dio la bienvenida a los equipos, ya que arreció con fuerza nada más que pitara el árbitro el comienzo del encuentro. Había amenazado durante toda la semana y en la víspera se había contenido. Sin embargo, al toque de silbato comenzaron a caer los copos, que condicionaron indiscutiblemente el duelo. Antes de que sufriera un receso, fue claramente del Real Ávila, que se adaptó mejor a las circunstancias y superó a La Granja en el comienzo. Creó dos ocasiones muy claras, por medio de Cueto y Trujillo, antes de que Vicente anotara el primer tanto al cuarto de hora con un poco de fortuna.
Los dos equipos se habían desafiado bajo la nieve, pero esta terminó por cubrir las líneas e hizo muy difícil sobre todo la labor del árbitro. De ahí que este decidiera interrumpir el choque poco después de que el Ávila se adelantara. El colegiado mandó a los jugadores a los vestuarios y ordenó que se limpiaran las líneas. Sin embargo, la nieve arreció con fuerza durante media hora y obligó a contemplar seriamente la posibilidad de suspender el encuentro. Finalmente cedió el temporal, colaboradores de La Granja (y alguno del Ávila) barrieron las líneas y el juego se reanudó sobre un campo de El Hospital completamente teñido de blanco.
Los jugadores de ambos equipos realizaron un breve calentamiento antes de ponerse de nuevo manos a la obra. Sin embargo, en la reanudación, el juego estuvo más equilibrado. La superioridad del Ávila ya no fue tan evidente, aunque es verdad que era muy difícil imponerse en los diferentes duelos debido al estado del terreno de juego, cada vez más embarrado. La Granja, que antes de la interrupción solo se había acercado a la portería abulense con un lanzamiento de falta de Xavi bien despejado por el abulense David a una mano, dio un paso adelante y empezó a generar juego, sobre todo por las bandas con las llegadas de Adrián y Xavi.
Al Ávila le sentó fatal el parón. Perdió el hilo de juego y se parapetó demasiado cerca de su guardameta. Esa floja respuesta al contratiempo de la nieve le costó cara a los visitantes, que recibieron el empate antes del descanso. El gol llegó en una estupenda media vuelta de Ricardo, derribado por Cabrera, que no tenía coartada posible. El propio Ricardo embocó la pena máxima y devolvió las tablas a un choque que, a falta de fútbol, sí que tuvo pasión y raciones y raciones de esfuerzo por parte de los equipos.
Curiosamente, el Ávila, que parecía el más interesado en que se reanudase el partido, quedó descolocado un buen rato. A Rui y a Cabrera, sus imponentes centrales, se les vio muy incómodos, mientras que la incidencia en el juego de hombres como Trujillo, Vicente, Pitu y Pito se redujo considerablemente. En cambio, La Granja, que había estado más remolona para volver al campo y se le había puesto la tarea cuesta arriba con el tanto inicial de Vicente, subió como la espuma, con Pluma y Lamas muy serios en el centro de la defensa, Alberto y David Martín firmes también en el medio, y Chiqui al mando de la batuta. Al descanso, ambos se marcharon 1-1 y ya no había rastro de la nieve, más allá, claro está, de la que quedó sobre el césped, que no impidió que el partido se jugara con relativa normalidad. Una suerte a tenor de cómo se había torcido el paisaje media hora antes y una buena noticia para el Ávila, al que le habría hecho un buen roto tener que regresar otro día a El Hospital.
Las circunstancias sonreían tras la primera parte al equipo granjeño, que además tenía más espacios para correr. Trataron de explotarlos Chiqui y Ricardo, mientras que Iván Yubero y Kike estuvieron dedicados a una labor más oscura pero igualmente efectiva para frenar al Ávila. Esa labor colectiva situó a La Granja un escaló por encima en el partido durante unos cuantos mionutos. El Ávila, en cambio, solo rescatado por dos intentonas de Pito, volvió a mostrarse, en el tramo inicial del segundo tiempo, lejos de la versión que había exhibido al comienzo. Su entrenador alistó a Emilio, que se reencontró con sus excompañeros de El Hospital, donde la temporada pasada dejó su sello. Su presencia dio más llegada al equipo abulense, que asustó con su potencial arriba. Pero no lo suficiente para obtener un dominio abrumador.
En ese tramo, ambos equipos estuvieron más largos y pasaron menos por el centro del campo, a pesar incluso de que el técnico de La Granja, Javier Jadraque, dio aire al medio con la entrada de Otero. También saltaron al campo Dani Tejedor, de regreso a El Hospital tras su paso por el Cuéllar Electricidad Eufón, y en el bando abulense Quirós, que sustituyó al autor del tanto de los visitantes, Vicente. Su influencia en el juego fue limitada porque a esas alturas, el barro que se acumulaba en las botas condicionaba todo lo demás.
El Ávila se quejó de una excesiva permisividad del árbitro en algunas acciones al tiempo que buscaba con ahínco y mucha ambición el segundo gol. Trujillo puso a prueba a Yiyo con un lanzamiento desde fuera del área en uno de los numerosos ataques que armaron los abulenses en el tramo final. También tuvo la victoria Quirós, que desaprovechó una inmejorable oportunidad cuando la defensa granjeña se había quedado parada pidiendo fuera de juego.
Mientras, La Granja esperó para lanzarse al contragolpe y tuvo oportunidades para hacer daño, pero anduvo impreciso en el último pase y no logró concretar apenas oportunidades. Al final, nadie consiguió romper las tablas en un choque en el que los locales tuvieron el mérito de levantarse de la lona en las peores condiciones, con un campo poco propicio para remontadas. El Ávila, por su parte, pagó haberse dejado ir durante un tramo del partido y se tuvo que conformar con un punto, que le supo a poco a tenor sobre todo de cómo había empezado el choque. Demostró, eso sí, que todavía posee un equipo con mucha calidad.
Ficha técnica:
1 CD La Granja: Yiyo; Adrián, Pluma, Lamas, Xavi; Alberto (Otero, m. 56), David Martín, Kike (Míchel, m. 93), Iván Yubero (Dani Tejedor, m. 69); Chiqui y Ricardo.
1 Real Ávila: David, Javi, Andrés, Rui, Cabrera, Javito (Emilio, m. 54), Cueto (Tuto, m. 83), Trujillo, Pito, Piru y Vicente (Quirós, m. 73).
Goles: 1-0, m. 15, Vicente; 1-1, m. 36, Vicente
Árbitro: Pérez Martín, de la Delegación de Burgos. Amonestó a Alberto en el CD La Granja; y a Cabrera en el Real Ávila.
Incidencias: Alrededor de 200 aficionados en el campo de El Hospital, buena parte de ellos seguidores del Real Ávila.