“El principio de etapa ha sido un desastre, no estábamos concentrados y nos pillaban todos los cortes. Menos mal que luego nos hemos metido en carrera”. Habla Pablo Lastras del recuerdo al compañero que se ha marchado. El dolor por Xavi Tondo –incinerado hoy en Olot (Girona), con el resto de Movistar Team allí presente- que bloqueaba sus fuerzas en el comienzo de la 17ª jornada del Giro 2011, pero que luego le ha impulsado hasta rozar el soñado triunfo que todo el equipo ansía dedicar a su amigo.
Lastras ha sido 2º en la meta de Tirano después de una larguísima escapada de 170 kilómetros en compañía de otros quince ciclistas. El madrileño ha sido, sin duda, el gran merecedor del triunfo, atacando hasta en tres ocasiones en el final de la jornada, la última en compañía de Visconti (FAR), Bakelants (OLO) y Ulissi (LAM), con los que se ha jugado al sprint la victoria, que caía del lado del último de ellos tras la descalificación de Visconti, en una polémica llegada. El director deportivo de Movistar Team, José Luis Arrieta, visionó junto a los jueces la llegada, pero no logró convencerles del cambio de trayectoria en el sprint de los dos corredores italianos: “Dicen que Ulissi cambia su trayectoria porque Visconti le empuja y no hay quien les saque de ahí”.
“Sabía que no podía dudar en salir a ningún ataque porque como lo hagas, acabas con tus opciones. Y lo he intentado varias veces, pero Visconti era hoy mi sombra. En el sprint, el problema ha sido el mismo del otro día con Vicioso. Son gente muy rápida y de cada diez sprints, me van a ganar nueve.. Yo he lanzado el sprint cara al aire, por donde era muy difícil remontarles y no he visto nada. Me han faltado 50 metros más porque iba muy lanzado, he arrancado un poco tarde. No sé si era justo que les descalificasen o no, pero sí que Visconti ha sido conmigo de los más fuertes de la fuga, no como Ulissi. Creo que he hecho las cosas bien, pero parece que he perdido ese instinto ganador que tenía antes. Ayer pasé un día muy jodido con los de Xavi y hoy también nos ha costado mucho entrar en la etapa. Está claro que su recuerdo siempre te da un plus de motivación en carrera. Hoy incluso me he descolgado en los primeros kilómetros porque tenía problemas de alergia, pero la experiencia me dice que en 230 kilómetros hay tiempo para recuperarse. Me da rabia porque sabía que tendría un par de oportunidades en este Giro y no he podido rematar ninguna de ellas”.