Ángel G. Alameda / El Estadio Adolfo Suárez se viste de gala este domingo a las 17:00 horas para acoger uno de los choques más esperados del inicio liguero: Real Ávila – Real Oviedo Vetusta, tercero contra segundo, ambos empatados a 13 puntos y con la ambición de asaltar el liderato del Grupo 1 de Segunda RFEF.
Los de Marc García llegan al encuentro con la moral alta tras permanecer invictos y con la intención de brindar una nueva alegría a su afición en casa, donde han hecho del fortín encarnado una garantía de éxito con triunfos ante Bergantiños y Lealtad. “Va a ser un partido atractivo para el espectador. Nos enfrentamos a un rival que hace las cosas muy bien”, aseguraba el técnico, restando dramatismo al duelo al recordar que “los exámenes se hacen mucho más adelante y las notas se ponen al final”.
García confía en mantener la solidez que ha caracterizado a su equipo: “Hasta en los malos días generamos tres o cuatro ocasiones. No debemos intercambiar golpes, sino tener control del juego”.
Dos equipos en estado de gracia
El Real Oviedo Vetusta, dirigido por Roberto Aguirre, llega con un balance idéntico: cuatro victorias y un empate, aunque con más poderío ofensivo (14 goles a favor por 9 de los abulenses). Los encarnados, en cambio, destacan por su fortaleza defensiva (solo 4 tantos encajados por los 7 de su rival).
El filial oviedista es uno de los equipos más verticales del campeonato. “A nivel ofensivo, es el mejor equipo que he visto”, reconocía García, que sin embargo no planea marcajes individuales sobre el goleador Joaquín, autor de cinco tantos. “Tenemos a los dos mejores centrales de la categoría. No hay que condicionar el partido a eso, sino imponer nuestro juego”.
Bajas sensibles en el conjunto encarnado
El entrenador abulense no podrá contar con Luis Forcén, lesionado de gravedad (rotura del ligamento cruzado anterior). “Es una pérdida muy gorda a nivel deportivo y humano. Es un chico encantador y un gran profesional”, lamentaba García, visiblemente contrariado por la acción que provocó su lesión por parte de un jugador del Alcorcón que no se ha disculpado con su compañero futbolista. Tampoco estarán Runy, por lesión, ni Prince, convocado con la selección de Guinea Ecuatorial, aunque el técnico recupera a Sarr.
Un historial desfavorable y un árbitro extremeño
Los precedentes no sonríen al Real Ávila: en 12 enfrentamientos en Segunda B en los años 90, el balance es de siete victorias oviedistas, un empate y cuatro triunfos encarnados. La única victoria abulense en casa se remonta al año 2000 por 3-2, con dos goles de Estecha y uno de Arquero.
El colegiado extremeño Jayro Muñoz, de 28 años, será el encargado de dirigir el encuentro. Lleva seis temporada entre Segunda RFEF y Segunda División B, categorías en las que ha arbitrado 61 encuentros, con 35 victorias locales, 9 empates y 17 triunfos visitantes. Promedia por choque 5,38 tarjetas amarillas y 0,28 rojas.
Mirando también a la Copa del Rey
La ilusión en la ciudad es máxima, no solo por este duelo, sino también por la cita copera del próximo 30 de octubre, cuando el Real Ávila recibirá al Real Avilés Industrial en el Adolfo Suárez a partir de las 20:00 horas.
El domingo, ante su público y con la bendición de Santa Teresa, la patrona de la ciudad que en estas fechas celebra sus fiestas, los encarnados buscarán un triunfo de prestigio para mantener su condición de invictos y, quién sabe, dormir líderes de la categoría.
