El Consejo de Gobierno de la Junta de Castilla y León autorizó ayer a la Consejería de Cultura y Turismo las aportaciones destinadas al Programa de Clubes de Categoría Superior en la temporada 2011-12, que recibirán las entidades deportivas de élite de la Comunidad, entre las que se encuentran el Óbila Club de Basket, al que para su equipo de LEB Plata del Fontedoso Carrefour El Bulevar se le conceden un total de 22.600 euros, y el Polideportivo Casa Social Católica que para el conjunto de fútbol que milita en la Segunda División femenina recibirá 5.000 euros.
El presupuesto global destinado por la administración autonómica es de 1.700.000 euros, viéndose reducido en relación con la temporada anterior en un 27,7 por ciento, medio millón de euros menos y la mitad de lo que se destinó en la campaña 2008-09, cuando se concedieron tres millones y medio de euros.
Los criterios seguidos para otorgar estas ayudas se han basado en la entidad social del club, la categoría en que compiten sus equipos, su presupuesto, el número de socios, el ámbito competicional o su presencia y proyección en los medios de comunicación.
En esta ocasión, el programa presenta dos novedades: la primera, que se ha incrementado el número de entidades subvencionadas de 48 a 59; y la segunda, que se “apuesta por la igualdad de oportunidades en el deporte entre hombres y mujeres, con la incorporación al programa de un mayor número de competiciones femeninas homologables a otras de categoría masculina ya incluidas”. Este factor ha hecho posible que el equipo de fútbol femenino de la Casa Social se vea beneficiado al estar en la segunda categoría nacional.
El club que mayor subvención ha recibido es el Blancos de Rueda, que milita en la Liga Endesa de baloncesto, con 103.800 euros, seguido del Cuatro Rayas de la División de Honor de balonmano con 98.800, y del Real Valladolid de la Segunda División de fútbol con 90.700. Los tres son de Valladolid, provincia que se lleva un tercio del total de presupuesto consignado por la Junta de Castilla y León.
Los beneficiarios de este programa tienen la obligación de difundir en sus actividades deportivas la marca “Castilla y León es Vida”.