Agustín González clausura el curso ‘Turismo del patrimonio natural: guías de pesca’

Los participantes en el curso de pesca posan con el alcalde de El Barco de Ávila

El presidente de la Diputación, Agustín González, ha clausurado en la rehabilitada Cárcel-Juzgado de El Barco de Ávila el curso ‘Turismo del patrimonio natural y cultural: guías de pesca’, en el que quince aficionados a esta práctica deportiva han enriquecido sus currículos con el perfil de guía de pesca, una figura que resulta complementaria de la oferta de turismo activo existente en la comarca. Este guía aporta al visitante sus conocimientos sobre el territorio, el río, la fauna y la flora que lo habitan, y de forma singular sobre la pesca de la trucha.

El valor de este profesional, añadido a la oferta de naturaleza de la comarca, ha llevado al Alcalde de El Barco de Ávila a destacar que la pesca deportiva y sostenible “ofrece a los municipios de Gredos un yacimiento de empleo por explotar”. “De hecho, nos encontrarnos ante una figura que ya ha funcionado con éxito en otras zonas de alto valor medioambiental de nuestro país, como en Pirineos, y que puede encajar en las propuestas recogidas en el borrador de la futura ley de pesca de nuestra comunidad”, en la que se destaca esta práctica como recurso de desarrollo rural, especialmente mediante el desarrollo de un turismo ligado a su práctica. 
En opinión de González, acciones formativas como el curso de guías de pesca “son un ejemplo de puesta en valor de un tesoro de valor incalculable como es el Tormes”,  que cabe defender “mediante el desarrollo de prácticas respetuosas con el medio ambiente, como puede ser un modelo de pesca bien gestionado”. La acción formativa se ha desarrollado durante casi un mes y ha estado organizada por el Instituto de Desarrollo Comunitario (IDC) y la Asociación de Ribereños del Tormes y sus Afluentes, ARTYA, en el marco de los programas de formación del Magrama dirigidos a profesionales del medio rural, y cofinanciado por el Fondo Social Europeo (FSE). La acogida ha sido tan positiva que las sesiones se han prolongado durante una semana más de lo previsto.
Los responsables del curso han destacado la capacidad de los alumnos para interpretar la microfauna local, incluidos su morfología, hábitos y ciclos de vida. También han acometido el montaje de señuelos de una elevada complejidad.
El programa del curso incluía nociones sobre la trucha y sobre entomología, así como sobre las diferentes características de los animales que cabe imitar a la hora de elaborar las ‘moscas’ para la pesca. Se han realizado prácticas de montaje durante todos los días.
ARTYA pretende continuar en esta línea de formación profundizando en algunos de los temas tratados, como la ampliación de las aptitudes sobre conocimiento del medio, manejo de grupos, lugares más aptos para la pesca, modalidades de esta práctica, artes tradicionales y normativa, entre otros aspectos.
Desde el IDC, esta actividad formativa se contempla como refuerzo de la pesca en su calidad de disciplina que aporta especial valor añadido al medio natural, uno de los principales recursos endógenos de la comarca. Precisamente el aprovechamiento de la riqueza potencial que albergan los territorios es la razón de ser del instituto, que desde 1984 promueve el desarrollo local en las zonas rurales desde la perspectiva del Leader. 
Por su parte, la Asociación de Ribereños del Tormes y sus Afluentes, ARTYA, tiene entre sus metas la conservación de la naturaleza, la aplicación de toda iniciativa relacionada con las especies piscícolas para el desarrollo sostenible del territorio y la mejora y protección de los ecosistemas acuáticos.
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