López Manrique / Siete meses después desde su última carrera, la atleta etíope residente en Peguerinos Likina Amebaw volvía a la competición, una vez superados los problemas que tuvo en el sacro. Lo hacía en el mismo lugar de su última carrera, en Mónaco, donde había participado en la Diamond League el 12 de julio de 2024.
Un período que Likina califica como “muy duro” y que la tuvo parada durante un importante período de tiempo. El último domingo 9 de febrero regresaba al principado monegasco realizando una gran actuación en la Monaco Run al rebajar su mejor marca personal en los 5.000 metros, dejándola en 14’33”, que supone el récord del recorrido que va desde el puerto de Hércules a la bahía de Montecarlo y que ella misma poseía desde el año pasado en 14’35”. Y lo que es más importante, el crono logrado la convierte en líder mundial del año en la distancia y la duodécima mejor marca de todos los tiempos, un puntazo para iniciar la temporada con la moral por las nubes.
Amebaw era la primera mujer en entrar en la línea de meta, seguida de la holandesa Diane Van Es con 14’39”, quien batía el récord de Europa de los 5 kilómetros que estaba en posesión de la también neerlandesa Sifan Hassan, acreedora de seis medallas en los juegos olímpicos -tres en París 2024, oro en maratón y bronce tanto en los 5.000 como en los 10.000 metros-, siete en campeonatos mundiales y seis en europeos.
Un récord europeo que podía estar en posesión de una española si a Likina Amebaw le hubieran concedido la nacionalidad que solicitó en el mes de octubre de 2023, dando el Ministerio del Interior la callada por respuesta, sin que la Real Federación Española de Atletismo hiciese nada para que la etíope pudiera representar a España, país donde reside de forma permanente desde hace varios años.
Algo incomprensible de un gobierno que con el apoyo del ente federativo -interesado en captar rápidamente a deportistas de otros países con marcas que aseguren medallas en competiciones mundiales y europeas- ha otorgado la nacionalidad española a varios atletas por carta de naturaleza, es decir, aquella que se concede por circunstancias excepcionales y cuya tramitación no está sujeta a las normas generales del procedimiento administrativo, eludiendo los requisitos que se exigen a otras personas para obtener la nacionalidad española.