@deportesavila / La Universidad Católica de Ávila (UCAV) ha presentado su colaboración con la edición XLVII de la Vuelta a Ávila 2023 que se celebrará del 7 al 9 de julio próximos. El patrocinio consiste en un maillot que se entregará al primer corredor abulense que cruce la línea de meta. Esta carrera se disputará en categoría Élite y Sub-23 con un desarrollo de tres etapas y 17 equipos participantes.
El director del Servicio de la UCAV, Ricardo Reier, ha destacado la gran tradición y presencia que tiene el ciclismo en Ávila. Además, ha dado la enhorabuena a los organizadores y ha destacado que “aunque parece fácil organizar este tipo de eventos requieren un gran trabajo, esfuerzo y dedicación”.
Por otro lado, Reier ha comentado la importancia que tiene para nuestra provincia este evento, tanto a nivel económico como a nivel deportivo, al mismo tiempo que ha señalado el compromiso de la UCAV, no solo con los clubes y deportistas mediante becas y ayudas, sino también con los eventos deportivos que se desarrollen.
Jesús Rodríguez, presidente de Deporábula, club organizador de la carrera, ha agradecido a la Universidad Católica de Ávila y a todas la empresas que están apoyando esta edición de la Vuelta, que es el primer gran evento que organizan y en el que el presupuesto con el que empezaron “se nos ha ido a más del doble”. No obstante, “esto es un gran preámbulo para hacer grandes cosas juntos”, ha señalado.
Las mejoras escuadras élite y sub-23
“Una vuelta de un nivel como Ávila se merece”, ha resaltado Rodríguez acerca de la prueba que contará con televisión en directo, habiendo confirmado su participación 17 equipos, de los mejores del panorama nacional ciclista élite y sub-23, formado cada uno de ellos por seis ciclistas más el director, un técnico y un mecánico.
Los nombres de las escuadras previstas en la ronda abulense son Caja Rural Alea, GS Sport Valencia, Vigo-Rías Baixas, Eolo Kometa, Maglia Tecnosylva Bembibre, Zamora Enamora, Café Baqué, El Bicho Bike Point, Brocoli Mecánico, Telcom, Laboral Kutxa, Huesca La Magia, Central Burgalesa, Torres Barceló Team, Controlpack, Essax y Gomur. Además, se está intentando la participación de una selección de Castilla y León con corredores de Ávila.
Por su parte, David Navas, vicepresidente del Club Deporábula ha destacado que a los ciclistas les ha costado mucho estudiar, “pasamos mucho tiempo en la bici y eso nos hace difícil estudiar”. Ha remarcado la importancia de tener un patrocinador como la Universidad Católica de Ávila por este motivo, cuyo maillot para el mejor ciclista abulense es “el más bonito”.
Tres etapas
Navas ha hecho un repaso de las etapas que tendrá esta edición, calificando como “espectaculares” los recorridos por las carreteras y puertos de la sierra abulense, a los que regresa la Vuelta a Ávila cuatro años después de su última celebración en 2019, siendo su último ganador Víctor Etxeberría.
La primera etapa de 105,7 kilómetros, con salida y llegada en Ávila capital el viernes 7 de julio, tendrá metas volantes en Niharra y El Fresno, pasando por Riofrío en la primera vuelta del recorrido y por Solosancho en la segunda, con dos puertos de montaña de 3ª categoría, que previsiblemente se resolverá al sprint en la meta del Mercado Grando, aunque consta de “muchas curvas, recovecos y carreteras estrechas” que pueden cortar la carrera si hace viento.
Después una primera jornada “fácil”, la segunda etapa de 144,7 kilómetros partirá el sábado 8 de julio de El Tiemblo para finalizar en Arenas de San Pedro, con un comienzo curvoso, susceptible de “una pequeña escapada”. Contará con metas volantes en Sotillo de la Adrada y Candeleda, una dura ascensión por las rampas de la localidad de Guisando y una bajada algo peligrosa antes de la meta en la población arenense. “Seguramente se romperá bastante la carrera y habrá poquitas diferencias entre los veinte primeros”, comenta Navas.
La tercera y última será la ‘reina’. Se disputará el domingo 9 de junio, con 129,4 kilómetros de recorrido. De ella se prevé salga el vencedor de la clasificación general final. Arrancará en Burgohondo en sentido ascendente hacia el puerto de Mijares, bajando a esta población en la que estará situada una meta volante, pasando por Gavilanes, para después subir los puertos de Pedro Bernardo y Serranillos. Descenderá hasta Navarrevisca, para acometer a continuación el puerto del Puente del Morisco, “un puerto que ya se hizo en la Vuelta a España, muy cortito, con carreteras estrechas y una primera parte de hormigón que agarra la bici mucho”. “Hasta ahí vendrá rota la carrera y se hará la selección” antes de transitar por un terreno lejos de meta “picando para arriba desde Navaluenga hasta El Barrraco”, localidad en la que estará situada la meta final.