@deportesavila / De la tristeza visitante del Real Ávila se pasaba a la alegría local, representada por el entrenador del Cacereño, Julio Cobos, satisfecho porque el primer gol de su equipo había “llegado muy rápido” y la expulsión de Babu les había facilitado el camino para eliminar al Real Ávila, consiguiendo el gol que igualaba la eliminatoria en el último segundo. La suerte acompañaba a los extremeños cuando parecía que ya no iban a meter el segundo gol.
Afirmaba el míster local que “el Ávila ha tirado una vez a puerta en los dos partidos que hemos jugado, además de la prórroga”. “Si hablamos de generar ocasiones, nosotros hemos sido superiores a ellos”. Ocasiones “muy claras para que el resultado hubiera llegado mucho antes”.
Cobos reconocía que habían tenido fortuna, “pero hay que trabajarla y la hemos trabajado bien confiando hasta el último minuto. El fútbol es muy caprichoso y cuando crees que ya no te va a llegar, nos ha llegado. Si algo caracteriza a este equipo desde principio de temporada es que tiene un corazón enorme y cuando crees que la cabeza o las piernas ya no te van a llegar a ningún sitio, el corazón nos lleva y hoy se ha demostrado”.