A las diez de esta mañana, los campos de Sancti Spíritu han sido testigos del inicio de la andadura del Colegios Diocesanos en la Liga Nacional Juvenil. Un arranque marcado por la preparación física pero no exento de balón para que los chicos demostrasen que en este período vacacional no se les ha olvidado jugar al fútbol.
“Primero zapatillas y luego botas”, ha constituido la primera consigna para los chavales abulenses que han tenido que soportar el calor. Buen ambiente, las bromas habituales de los reencuentros entre amigos y mucho trabajo, han presidido la primera sesión bajo las órdenes de Zamorilla y Chuchi, que un año más, junto a Yordi y Javi Galán, capitanearán el barco colegial que no ha hecho ahora más que zarpar. En el horizonte, el objetivo de la permanencia. En el presente, trabajo, trabajo, trabajo y más trabajo.
Un total de 26 jóvenes futbolistas tratarán de buscar sitio en una plantilla que no tendrá más de 18 jugadores, secundada todo el año por un equipo en regional juvenil del que podrán ir subiendo los chicos que se ganen una oportunidad a las órdenes de Somoza y Yonte.
Ilusión, ganas y actitud, seguro que les va a faltar a estos ‘valientes’ que ya desde hoy han empezado a sudar la camiseta.