Real Ávila y Baracaldo empatan a cero en un partido donde las defensas se impusieron a los ataques
Contundente despeje del rocoso Basagoiti ante el encarnado Emilio |
Ángel G. Alameda / Encuentro sin goles el de la ida de la segunda eliminatoria de ascenso a Segunda División B donde se cumplieron las expectativas del conjunto visitante Barakaldo de no encajar un gol, mientras que el cuadro local no pudo mostrar la pegada de su artillería pesada y se quedó sin anotar. Un empate a cero vivido de nuevo con un gran ambiente en el estadio Adolfo Suárez que viene a demostrar que si a la afición le das buenos platos están dispuestos a comérselos aunque en esta ocasión no pudiera el equipo merendarse al rival para la vuelta en Lasesarre, donde se decidirá quien de los dos jugará la final de la tercera y decisiva eliminatoria que pondrá al ganador en la categoría de bronce del fútbol español.
Los jugadores de ambos equipos hicieron un destacable esfuerzo por superar al rival. El empate, sin embargo, podría calificarse de justo por lo visto sobre el terreno de juego, si bien el Real Ávila fue el que disfrutó de mayor número de ocasiones, sobre todo en los últimos minutos de la primera mitad y en los iniciales del segundo tiempo. Por su parte, el Barakaldo supo presionar de forma asfixiante, sin dejar apenas jugar a los encarnados quienes lo intentaban pero no encontraban la forma de llegar con claridad al área visitante.
Once inicial del Real Ávila, que volvió a ser arropado por más de 3.000 aficionados |
Una primera parte sin fútbol, con poco bagaje ofensivo mostró a un Real Ávila que sacaba en el once inicial algunas novedades respecto al que jugó el domingo anterior. José María volvía al lateral derecho en vez de jugar de central, haciéndolo en ese puesto Fran y Josito por la izquierda, en lugar de Tirso y Toño, éste lesionado. En el centro del campo Iván Cabezudo se escoraba a la derecha y Diezma metía a Trujillo en la media en detrimento de un delantero como Pito. Más contención de la habitual en el equipo encarnado frente a un Barakaldo difícil de perforar en su muralla defensiva, con un mediocampo asfixiante y un solitario Camino arriba que mostraba gran movilidad cayendo a las bandas, que fueron las protagonistas en numerosas ocasiones debido a que se sacó el balón desde ellas en infinidad de oportunidades. Apenas se podía ver una jugada con más de tres pases seguidos.
Peña con el balón que intenta enviar a Emilio |
No fue sino hasta el minuto 25 cuando se intuyó la posibilidad de que el Real Ávila mostrase su juego de pase entre líneas. Lo hicieron Gustavo y Peña sin consecuencias, con el 7 escorado a la banda izquierda, mientras que en la derecha el carril estaba franco para el gualdinegro Alberto Delgado, cuyos saques de banda largos parecían córners. Por el lado derecho se vio la primera oportunidad clara del partido. José María se marchó por su carril, yéndose de cuantos le salían al paso; envió el esférico a Iván Cabezudo, que la puso medida a Emilio, cuyo remate de cabeza salió fuera.
Josito fue titular en el lateral izquierdo en lugar del lesionado Toño |
Había transcurrido casi media de hora de encuentro y la jugada anterior era todo el bagaje de peligro que se había ofrecido al respetable que poblaba las gradas del estadio. Quien más lo intentaba era el Real Ávila pero no existía forma de buscarle las cosquillas al Barakaldo. Emilio quiso sorprender desde lejos con una vaselina al portero Txemi, que se fue alta, y Josito no llegó con la cabeza a rematar un balón largo que recibía en el área del conjunto vizcaíno.
Trujillo y Javi fueron dos de los mejores hombres del Real Ávila |
Los cinco minutos anteriores al descanso proporcionaron varias ocasiones fallidas. En la primera, Peña se va de varios contrarios y se la pasa a Gustavo, quien le envía a Emilio, que no puede llegar a rematar. A continuación es Iván Cabezudo quien sin ángulo dispara de forma inocente a las manos del portero baracaldés. Un disparo de Eneko al larguero supuso la única oportunidad clara del Barakaldo en toda la primera mitad, unos segundos antes de que Josito rematase de cabeza, marchándose fuera por poco el balón tras un saque de falta de Chiqui.
Txemi atrapa un balón a los pies de Pito |
A la vuelta de vestuarios, el Real Ávila hace un cambio obligatorio. Entra Tirso en lugar del lesionado José María, renqueante en los últimos minutos de la primera mitad con problemas en el cuádriceps. Las cosas cambiaron algo con el conjunto encarnado intentando jugar con mayor precisión, lo que obligó al Barakaldo estirar su cerrojo. Las ocasiones de peligro brillaron por su ausencia y ninguno de los dos contendientes tuvo una oportunidad clara de marcar. Lo más aproximado fue un centro de Txutxi que remató de cabeza Camino cuatro minutos antes de la hora de juego y que atrapó con dificultades Félix. La entrada de Andoitz y Rubén Espinosa intentó dar más mordiente al equipo vizcaíno pero sin resultado positivo, como tampoco la tuvo la salida al campo de Piru y Pito en el bando abulense.
El Barakaldo estuvo arropado por un buen número de aficionados en la grada de general |
Con el empate a cero final, todo queda para los noventa minutos que se jugarán el próximo sábado en Lasesarre, donde al Real Ávila le espera un contrario con mucho poderío físico, gran rigor defensivo y una afición en contra, que se portó de forma caballerosa en su visita a la capital abulense.
Ficha técnica:
0 Real Ávila: Félix, Josito, Fran, Javi, Fini (Tirso, m. 46), Iván Cabezudo, Trujillo, Peña, Chiqui (Piru, m. 73), Emilio (Pito, m. 79) y Gustavo.
0 Barakaldo: Txemi, Goiria, Alberto, Ariño, Basagoiti, Mentxaca (Etxabe, m. 84), Garrido, Camino, Eneko, Eraña (Rubén Espinosa, m. 63) y Txutxi (Andoitz, m. 62).
Árbitro: El colegiado madrileño Álvaro Moreno Aragón, asistido en las bandas por Daniel Carrasquilla López y Carlos Biosca Rabadán. Mostró tarjetas amarillas a los locales Javi, Trujillo, Chiqui y Piru. Y a los visitantes Goiria, Basagoiti y Txutxi.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la ida de la segunda eliminatoria de la fase de ascenso a Segunda División B, disputado en el estadio Adolfo Suárez, con asistencia de unos 3.200 espectadores, de los que aproximadamente 200 eran seguidores del Barakaldo. Antes de comenzar el partido y en el calentamiento, Manu, entrenador de porteros del Baracaldo tuvo que ser retirado del campo con fractura de fémur.