López Manrique / El Óbila Club de Basket recibe este sábado, a las 19:00 horas, en el CUM Carlos Sastre, al Oposita Marín Ence Peixegalego, con arbitraje de la pareja leonesa formada por Julio César Alonso Díez e Iván Valbuena López, buscando enmendar el batacazo que se pegó la jornada pasada en la cancha del Obradoiro Ames y regresar a la trayectoria triunfal anterior que le llevó a encadenar cuatro victorias consecutivas.
Pero el duelo será complicado para los de Antonio Déniz, dado que juegan ante el segundo clasificado, que marcha con 13 victorias y 2 derrotas, las mismas que el líder Círculo Gijón. En la primera vuelta vencieron los marinenses por 80-60 en el pabellón municipal A Raña, en un partido donde de los visitantes solo se salvaron Dani Stefanuto y Santo Jesús Cabrera. Ahora, el Óbila quiere la revancha y poder sorprender a su contrario.
El argentino Nicolás Álvarez, segundo entrenador del Óbila, señala que tras la derrota del domingo en Milladoiro han estado trabajando desde el lunes toda la semana porque que viene “un partido duro” y se encuentran “con la mente de ganar en casa”, aprovechando que “vamos a tener más apoyo de lo normal” por la gran afluencia que se espera al llevarse a cabo la presentación de la cantera del club abulense.
Respecto al rival, Álvarez informa que “tiene cuatro jugadores referentes, dos interiores y dos exteriores, que hacen el 75 por ciento de sus puntos. Es un equipo completo, que lo viene haciendo bien, pero nosotros, a diferencia del partido anterior tenemos que hacernos fuertes en defensa con un bloque duro, hacer valer nuestra localía, intentar poner nuestra dinámica y ser verticales”.
DAR UN PASO MÁS
Considera el técnico ayudante de Antonio Déniz que el Óbila, que contará con la baja del base Eugenio Zustovich, puede competir con cualquier rival, con independencia de cual sea su situación clasificatoria, pero han de tener “un margen de error menor y estar un paso más arriba en la concentración”.
A su vez, el pívot verderón Santo Jesús Cabrera advierte que “si empezamos muy por debajo del ritmo que nos van a poner, nos van a pasar por encima”. Para evitarlo, los locales saldrán a la cancha “con muchas ganas de no repetir lo de la semana pasada”, intentando “dar el nivel y un paso más en intensidad para igualarlos e incluso superarlos”.
Según Cabrera el objetivo en cada partido “es ir poco a poco, remando para llegar lo más arriba posible durante la clasificación, que de momento está bastante dispar con los primeros, pero si seguimos trabajando no descartamos que podamos hacer algo más”, con “el apoyo de la afición, que se nota a la hora de jugar”, sintiéndose más cómodos en su cancha como es el caso de la próxima jornada.
