La sexta etapa del Giro de Italia, disputada hoy entre Orvieto y Fiuggi Terme, ha sido una de esas jornadas que a veces se califican de intrascendentes o de transición, entre dos jornadas que despiertan más expectativas. Sin embargo, como apunta Carlos Sastre, sus 216 kilómetros han dejado rastro en las piernas de los ciclistas.
“La etapa de hoy no ha sido nada fácil. Ha transcurrido por un terreno quebrado, con un constante sube y baja, en el que parecía que te iban agarrando. Prácticamente no había un tramo llano”, ha comentado el corredor del Geox-TMC al término de la misma.
A nivel de clasificación, no ha habido ningún cambio. Sastre continúa en el puesto 44º de la general, a 2’08” de Pieter Weening. “Se ha llegado al sprint y hemos terminado en el pelotón. Para el equipo no ha habido ningún problema y hemos pasado otro día más. Ahora nos esperan 150 kilómetros de traslado hasta el hotel, lo que significa que va a ser un día largo en este Giro de Italia y que todo lo que se pueda descansar y recuperar siempre es importante”, ha señalado el ciclista español.
Los tres ciclistas del pelotón abulense llegaron en el mismo tiempo que el vencedor al sprint, Fran Ventoso, compañero de Pablo Lastras en Movistar, con el de San Martín de Iglesias ocupando el puesto 14º. En el 64º entraría Carlos Sastre y en el 86º Jesús Hernández.
El holandés Pieter Weening (Rabobank) sigue como líder portador de la ‘maglia rosa’, con Pablo Lastras continuando como 5º en la clasificación general, a 22 segundos; Carlos Sastre (Geox-TMC) en el lugar 44º, a 2’08”; y Jesús Hernández (Saxo Bank) el 100º, a 15’47”.
Este viernes se disputará la séptima etapa de este Giro de Italia, la primera que concluirá en alto, con un corto recorrido de 110 kilómetros entre Maddaloni y Montevergine di Mercogliano, un puerto de segunda categoría, de ocho kilómetros con porcentajes que no llegan al seis por ciento, pero donde se podrían ver los primeros exámenes entre los favoritos.