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Noel Martín en el podio burgalés |
El fuerte viento y la elevada velocidad del pelotón provocó en una bajada entre Villandiego e Iglesias una fuerte caída en la que se vieron implicados dos corredores. Uno de ellos sufrió unos arañazos sin importancia, pero el segundo. Antonio Martínez, se llevó la peor parte al fracturarse la clavícula y sufrir una fuerte conmoción cerebral. Ello obligó a trasladarle con urgencia al Hospital Universitario, obligando a neutralizar la carrera por espacio de media hora.
Sobre el kilómetro 20 de la prueba, se formó una fuga de la cual salieron 19 corredores, seis de ellos argentinos, los máximos protagonistas de la jornada. Unos kilómetros después salto Noel del gran grupo, logrando zafarse del marcaje al que estaba siendo sometido y tras coger a un grupo intermedio contactó con la cabeza de carrera. Uno de ellos, López, ganaba en Burgos en solitario, mientras que Sergio Pérez finalizaba en el puesto 7º, y en teoría el primero de Castilla y León, a 1’04”, cuatro segundos menos que Noel Martín, que no estaba satisfecho con dicha clasificación ya que después de subir al podium, recibir el maillot y el trofeo, todo quedó en cuarentena porque el corredor reclamaba tener la licencia en León, cuando nadie -ni siquiera los jueces- lo sabía y tampoco estaba inscrito como castellano leonés en el Trofeo de Castilla y León, al que pertenece la prueba.
La carrera burgalesa la acabaron otros dos corredores abulenses. Alejandro Arribas (Gomur-Cantabria Deporte) ocupaba el puesto 25º, a 4’25”, siendo el 8º ciclista élite de Castilla y León, en tanto que Jonatan López entraba en el lugar 36º, a 4’28”, el 12º de la región.
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