Ángel G. Alameda / Después de comenzar la temporada con dos empates, el Real Ávila vuelve el domingo al Adolfo Suárez para medirse al filial de la Ponferradina, en una situación que no es desde luego de urgencia, pero que muestra la necesidad de los encarnados de conseguir su primera victoria porque tan solo cuenta con dos puntos, con ocho equipos por delante en la tabla, de los que el líder Salamanca UDS ya les saca cuatro puntos.

El curso no se ha iniciado a plena satisfacción para los encarnados, que ha dejado escapar cuatro puntos, dos en casa y dos fuera y no puede ceder más si no quiere verse pronto lejos de los puestos de ascenso. El Real Ávila está obligado a dar una alegría a sus incondicionales y encontrar el pulso a una competición donde no se permiten demasiados regalos.

El entrenador del Real Ávila afronta este partido “con optimismo, con ilusión y dejar aparcado el encuentro de la semana pasada”. “Haremos bueno el punto del otro día y seguiremos en línea ascendente”, comenta el míster, recordando que quieren “el mismo inicio de la temporada pasada: cinco puntos en tres partidos ante tres muy buenos rivales”. Con la Arandina fueron por delante durante 95 minutos pero al final les faltó “esa chispa de efectividad para llevarnos los tres puntos”.

En casa tenemos que dar la sensación de qué queremos ir a por el partido desde el primer momento, sobre todo con la cabeza fría, tranquilos y esperando nuestro momento”, explica el míster, que en su primera comparecencia en el Adolfo Suárez considera que “salimos demasiado tensionados” y se precisa ser “regulares durante los noventa minutos”.

Este año tenemos que trabajar duro con el objetivo de estar entre los mejores”, asevera Borja Rubiato, aunque en las primeras jornadas no desea “que nadie se vuelva loco”. “La liga es un camino largo, con mucho recorrido”, comenta, donde lo principal es “llegar con opciones a final de temporada”. Y para ello cuenta con “un equipo con bastantes recursos para intentar pelear por todo”.

Si en ataque el conjunto abulense presenta unos aceptables cuatro goles a favor, en defensa se han recibido otros cuatro y debe mejorar sus capacidades para que la puerta no se vea perforada con esta asiduidad. En Aranda de Duero “defensivamente se hizo un buen partido y poco a poco pisamos más el área”, asegura Rubiato.

El rival

Enfrente estará una Ponferradina B, recién ascendida a Tercera RFEF, que está instalada dos puestos por delante, con un punto más, tras un triunfo por la mínima sobre el Unami y una derrota encajada en la jornada inaugural en el campo del Mirandés B por 3-1. En su plantilla hay jugadores que están en la órbita del equipo de la Liga Smartbank y por su juventud tienen hambre para llegar cuanto antes al fútbol profesional.

Acerca del contrario, Borja Rubiato informa que “se ha reforzado con jugadores que han estado en Tercera en otros grupos, con gente de origen africano y mucha presencia física. Al ser un filial todos sus jugadores están bien dotados técnicamente y de medio campo para arriba son desequilibrantes, terminando con mucha gente en el área rival. Es un equipo impulsivo y muy pasional de lo que podemos aprovecharnos”. No obstante, “debemos tener mucho cuidado con sus transiciones y hacer muy bien la vigilancia defensiva”, advierte.

El mismo día del partido, el Real Ávila realizará un entrenamiento matinal suave a balón parado para ultimar los preparativos del encuentro y que los jugadores desconecten del fútbol día y medio, el viernes por la tarde y el sábado entero.

Para la ocasión, Borja Rubiato no podrá contar con el máximo goleador del Grupo VIII, Ivi, autor de tres dianas en dos choques. El segoviano sufre una rotura muscular de dos centímetros y estará varios días de baja. Tampoco dispondrá de Chico, por motivos personales.

REAL ÁVILA - PONFERRADINA B
Domingo 25 de septiembre de 2022
Hora: 17,00
Campo: Estadio Adolfo Suárez
Árbitro: Iván Pablo Gómez (Salamanca)
Asistentes: Sergio Carreto García y Álvaro Castaño Maestre

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