74-112 El Óbila no puede con un intratable Círculo Gijón

López Manrique / El Círculo Gijón Noega Baloncesto pasó el rodillo sobre el Óbila Club de Basket, que encajaba su primera derrota de la temporada en el Carlos Sastre. El líder apabulló a los verderones, que no opusieron resistencia, sobre todo en la primera mitad, reflejándose la diferencia en un marcador por encima de los cien puntos, como viene siendo habitual en los resultados obtenidos por el equipo asturiano, el mejor de los que hasta ahora han pasado por la capital abulense, con una plantilla confeccionada para ascender de categoría.

Nada que ver con el partido de la semana pasada donde los de Antonio Déniz rompieron las costuras al Chantada, causando al conjunto lucense su primera derrota, en un triunfo incontestable para las huestes locales. Ya en el primer cuarto los gijoneses sentaban las bases para adjudicarse la victoria con un electrónico que señalaba un 20-39, casi doblando el guarismo de los de Ávila, impotentes ante la fortaleza defensiva y ofensiva del rival.

Aunque en los primeros compases del duelo el Óbila se mantuvo a la par con el Círculo Gijón mediante Juan López Yuste -que no pudo repetir su excepcional actuación anterior- y Dani Stefanuto, a los dos minutos del arranque empezó el cuadro visitante a establecer diferencias para fijar un 12-24 a falta de poco más de cuatro para la conclusión del primer cuarto. Estuvieron durante cerca de cuatro minutos los verderones sin sumar punto alguno, mientras que los gijoneses no dejaban de encestar con Sharik Idris y Lance Paul a la cabeza, imprimiendo una velocidad imparable y una soberanía sin discusión bajo tableros.

La actuación del Círculo Gijón era irrebatible y así continuó al inicio del segundo cuarto, si bien los locales lograron al menos reducir la fuerte sangría que estaban sufriendo dejando sin anotar al contrario durante un par de minutos, lo que provocó que Nacho Galán, el entrenador visitante parase el partido. Interrupción que sirvió para que los suyos retomasen la labor anotadora con Idris al mando, que le ayudaría a convertirse en el MVP y el máximo anotador del partido. Al descanso, el resultado ya era bastante elocuente, 33-65, casi treinta puntos de ventaja para el líder.

Tras el descanso, los gijoneses levantaron el pistón. Era prácticamente imposible que les arrebatasen la victoria. Por eso se dedicaron a mantener su distancia sideral, sin que se quebrase su excelente juego. El tercer cuarto terminaba con un 55-89 y el final y definitivo en 74-112, dejando a los aficionados verderones perplejos porque habían visto a un ciclón sobre la cancha.

El próximo domingo, a las cinco de la tarde, el Óbila se desplazará a la localidad coruñesa de Betanzos para enfrentarse al Ineltrón Santo Domingo, conjunto que es antepenúltimo y que solo atesora un triunfo.

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