Muy pronto, entre seis y seis y media de la mañana, tendrán que partir del Santuario de Chilla en Candeleda, los montañeros que participen en la Travesía Ramón Asiaín para cubrir los 20 kms. de distancia y salvar un desnivel acumulado de casi 2.000 m. durante un tiempo de entre 7 a 10 horas por un recorrido de dificultad alta.
Se inicia la travesía ascendiendo por la pista que sale del Santuario hacia la Vega de la Zarza. Luego se continúa por la garganta de Chilla hasta llegar al Cristo, desde donde se inicia la subida hacia la portilla de Cobos por entre grandes bloques de granito. Al final estará el primer control, lugar de reposición de fuerzas, antes de pasar el Cuchillar de las Navajas y llegar al segundo control en Portilla Bermeja. Los que cuenten con más fuerzas podrán acercarse al Almanzor, y el resto dirigirse al tercer control situado en el collado del Sillao, después de bajar por el camino del Tío Domingo. Una vez aquí se desciende por la garganta de Chilla y tras pasar por el Cristo se retorna de nuevo al Santuario, cerrándose el control a las seis de la tarde, luego de una jornada calurosa.
