Hace mucho, mucho tiempo, un club con problemas económicos importantes se sometió a la ley que estaba de moda entonces y se convirtió en Sociedad Anónima Deportiva. Hubo personas, entonces, que compraron acciones de ese club, creo que recordar a 10 mil pelas, en vulgo 60 pavos de los de ahora. El club se salvó de perecer entre las deudas y el fuego eterno de la hacienda devoradora. (Leer más…)
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